lunes, 11 de junio de 2007

Un artículo de denuncia inédito que escribió Fidel hace 52 años y que se creía perdido al ser secuestrada la edición por los esbirros de Batista

Un artículo que no circuló
Ernesto Vera
Menos de dos meses —15 de mayo al 7 de julio de 1955— transcurrieron desde el día que Fidel salió del presidio de Isla de Pinos hasta que viajó a México. Fueron días de gran tensión debido a la preocupación popular de que el líder sufriera un atentado. A pesar de los peligros su actitud combativa se hizo sentir y tuvo manifestaciones diversas. Una muy importante fueron los artículos que publicó en el diario LA CALLE donde denunciaba constantemente los crímenes de la dictadura, tanto de los jóvenes combatientes del Moncada como de hechos similares anteriores y posteriores.
Convencido de que no había otra opción que la lucha armada, antes de partir dejó creada la Dirección Nacional del Movimiento 26 de Julio, que desde ese momento comenzó su organización en todo el país, mientras en México iniciaba los preparativos de lo que resultaría ser la expedición del yate Granma. En ese corto tiempo Fidel tuvo que enfrentar numerosas agresiones que incluían a sus familiares y compañeros. Fue así como se hizo irrespirable aquella situación, la que denunció más ampliamente en un artículo incluido en el periódico LA CALLE el 17 de junio de 1955, fecha en que la policía ocupó por la fuerza los talleres de ese periódico y confiscó los ejemplares de la tirada de ese día.
Hasta ahora se había creído que el texto del mencionado artículo escrito por Fidel había quedado en los linotipos del taller, debido al secuestro de la edición. Sin embargo, como ya se había impreso todo el periódico, hubo quien pudo guardar un ejemplar: fue el destacado periodista revolucionario Raúl Quintana, quien lo conservó hasta 1994, cuando falleció. Él, que sería después del triunfo revolucionario uno de los directores del periódico, dejó a su hijo Raúl un libro inédito de gran valor para la historia del periodismo y, entre los ejemplares de LA CALLE que guardó estaba el del 17 de junio de 1955, que comenzaba en primera plana, con pase para la página 6, el texto del artículo que hoy, 52 años después, podremos leer.
A pesar del deterioro del ejemplar se pudo capturar el texto completo.
Texto completo de las declaraciones entregadas a la prensa antes de partir hacia México, publicadas por varios periódicos, entre ellos Alerta y Ataja el 8 de julio de 1955:
“Me marcho de Cuba por habérseme cerrado todas las puertas para la lucha cívica. Hace seis semanas estoy en la calle y estoy convencido que la dictadura tiene intenciones de permanecer en el poder 20 años disfrazada de distintas formas, ignorando que la paciencia del pueblo cubano tiene sus límites. “Residiré en un lugar del Caribe. De viajes como este no se regresa o se regresa con la tiranía descabezada a los pies.”
Fidel Castro
Tomado del Periodico Granma

1 comentario:

Cuba en Sucesión dijo...

Para las Garrapatas del Caballo

El enero victorioso fué de todos los cubanos y no solamente de Fidel Castro y algunos de sus seguidores.
El triunfo de la revolución cubana (que no pertenece solamente a Fidel Castro), en verdad dignificó a miles de hombres y hasta pudiera haber sido la verdadera independencia.
Con lo que no contaban nuestros compatriotas era con que Fidel Castro los involucrara en un sistema social que no tenía nada que ver con las ansias de libertad y desarrollo.

Lo bueno tiene que ser reconocido y como tal debemos reconocer que los cubanos, hoy en día, tenemos una preparación (comparativa) mejor que cualquier otro país del Tercer Mundo.
¿Para que nos sirve si no podemos ser creativos?

De sobra sabemos que los cubanos no tenemos (dentro de Cuba) ni criterios ni opinión. Nuestra isla está sumergida en un régimen de ordeno mando que no nos deja, tan siquiera respirar y todo tiene que ser de acuerdo con la voluntad del “Comandante en Jefe”.

Interpretemos bien:
Imperialismo es la actitud y doctrina de quienes propugnan o practican la extensión del dominio de un país sobre otro u otros por medio de la fuerza militar, económica o política.
El gobierno de los E.U. es imperialista, pero el sistema no lo es por obligación.

Particularmente no me ha interesado servir a ningún amo. Creía, sinceramente que estábamos en el camino correcto, hasta que me di cuenta de la corrupción en las altas esferas del desgobierno y de como engañaban día tras día, a nuestro pueblo.

Los epítetos, adjetivos calificativos con que pretenden ofenderme por los artículos que escribo, no hacen otra cosa que demostrar la incapacidad de rebatir, con palabras, las varias verdades que plasmo en blanco y negro.

Efectivamente, no éramos satélites de la URSS, peor aún, éramos tan marionetas que no podíamos contradecir a nuestros asesores soviéticos, sin que nos lleváramos un rapapolvo de nuestros superiores.

Cuando alguien se refiera a Marx y al Che Guevara, deben dejar fuera a José Martí, que nunca fué socialista ni nada que se le pareciera.

Les aconsejo que no repitan tanto, que estan firmes, decididos y seguros en sus convicciones, porque saben perfectamente que eso solo es propaganda y que de verdad estan temblorosos, indecisos e inseguros a causa de tanta porquería política y falta de comida.

Por cierto:
¿Saben cuanto le cuesta, al pueblo de Cuba, la “desinteresada solidaridad?
La solidaridad no se come.

Vergüenza debían darle de que Fidel Castro le quite lo poco que tiene, el pueblo de Cuba, para regalarselo a otros pueblos del mundo. Así no se construye una sociedad moderna. Eso solamente es propaganda política en forma de ejércitos de médicos y maestros hambrientos en busca de dólares para mantener a su familia en Cuba.

Siento verguenza ajena, solamente de escuchar la coletilla politiquera “Operación Milagro”. Tan comunistas y no tienen otra forma de confundir a las masas que utilizando una palabra que significa algo no explicable por las leyes naturales y que se atribuye a intervención sobrenatural de origen divino.

Vamos, que devolver la visión (desde el punto de vista médico) es algo natural y no tiene que intervenir “San Fidel”, ni “San Hugo”, ni “San Ernesto”. Nada, que el gasto en que se incurre es tan alto que solamente se puede realizar, siendo subsidiado (escasamente) por el petróleo venezolano.

El pueblo cubano sigue comiendo 15 días al mes por la libreta de abastecimiento. Los otros 15 días no se sabe bien, unos le llaman robo al Estado y otros ajuste de salario. Recuerdan la película “Memorias del Subdesarrollo”:
¿Saben a donde va a parar esa gran humanidad?